sábado, 31 de diciembre de 2011

Un año más


Hoy es 30 de diciembre de 2011, sólo un día, nos separa del fin de año, y muy seguramente la gran mayoría de nosotros tendremos una reunión familiar, que consistirá en una cena, risas, bromas, copas, baile, sin embargo, no todos podremos o tenemos esta oportunidad de convivencia, otras personas dormirán en la calle, buscaran en botes de basura un pedazo de pan, algo que haya sobrado para mitigar la sed, incluso, buscaran un pedazo de abrigo o de manta para cubrirse del frió, habrá quienes tengan que ahogar sus penas y olvidarse de estas en alcohol o cualquier otra droga, otros pasaran la noche en los hospitales bien con algún familiar enfermo y en la mejor parte esperando la llegada de un nuevo ser.

En la ultima noche de este año, entre risas, abrazos, lagrimas también tendremos necesariamente que realizar un balance de lo que fue nuestra vida. Por lo que a mi respecta en este año tuve muchas satisfacciones, para mi es un excelente año y tengo la plena certeza  que el próximo será mucho mejor.

En este año también tuve bajas: personas que se fueron, no hubo pleitos, discusiones, sencillamente cumplí mi ciclo con ellos, proyectos personales que no fue posible realizar; sin embargo, también ingresaron a mi vida nuevas personas, tengo nuevos proyectos, nuevas expectativas.

La vida continua, el tiempo avanza de manera inexorable, este no se detiene (al menos no tengo conocimiento de lo contrario), con el avanzan nuestras vidas, nos arrastra, en esa vorágine de sentimientos humanos.

Termina un año, comienza otro. Tengo mis proyectos, unos nuevos, otros los retomo de los que he dejado pendientes y que simplemente esperaron por mí para un momento en que tuviéramos empatìa.

Mi blog, tuvo que esperar, estamos de regreso, seguiremos tratando de narrar lo que  a juicio nuestro forma parte de la cotidianidad de la vida, pocos muy pocos son los que se atreven a  dejar un comentario; sin embargo, el contador de visitas me muestra que existe quienes se asoman a leernos, nos visitan para ver que estamos creando, gracias a quienes se dieron la oportunidad de pasar por este espacio de esparcimiento, de reflexión y de complicidad.

En el futuro se vislumbran cambios, fuertes cambios, nuestro país es actor importante de estos, elecciones presidenciales que presagian el regreso del dinosaurio, lo anterior sólo es posible debido a la falta de oficio político del partido en el poder, del hartazgo de la sociedad de una guerra interminable con el narco, donde por más esfuerzos que realiza el gobierno para crear la sensación de que se va ganando la guerra, lo cierto es que la aparición de montones de cadáveres tirados en las calles, que podrían ser de cualquier ciudad del país nos demuestra que la realidad es que estamos en la parte más álgida de esta entupida lucha; por otro lado, el hartazgo de la sociedad en los políticos y en los partidos políticos.

Otro cambio importante lo son las profecías Mayas, en un contexto serio los Mayas nunca predijeron el fin del mundo, hablaron de un alineamiento de la tierra con el centro de la galaxia, ellos nunca hablaron de destrucción sino de transformación, del fin de un periodo  y el inicio de otro, lo anterior trae como consecuencia en gran cambio energético, que de alguna forma va influir en nuestro organismo, energía y materia es de lo que esta compuesto el universo y el organismo humano, por lo tanto, algún cambio vamos a experimentar no estamos ciertos de que tipo.

Existen quienes señalan que ese cambio de energía es un salto enorme en el individuo que lo va conducir a una gran espiritualidad, que lo va a llevar a experimentar otras formas de energía una nueva conciencia del universo y nuestra relación con él y con nuestros semejantes, ya veremos que sucede; no obstante, el sólo hecho hablar de la sola posibilidad de un cambio en nuestra espiritualidad resulta magnifico en oposición a este mundo materialista en el que nos ha hecho creer la mercadotecnia, de lo que sin importar las consecuencias sólo se ha beneficiado un pequeño grupo de individuos siempre aviesos al poder, a la intriga a la dominación del mundo y de sus pobladores; sin embargo, siempre debe existir la esperanza de un mundo mejor.    

!!Félix año 2012”!!.
Un abrazo.

martes, 27 de diciembre de 2011

El lado oscuro


La muerte, es una de las entidades que conviven con nosotros de manera tan cotidiana que generalmente no reparamos en su presencia. Esto sin dejar de percibir las diversas formas en que es representada: poesía, canto, literatura, en las religiones, entre otras formas.

Esto viene colación, porque asistí a un velorio del padre de una amiga, quien unos días antes de morir pasó por mi casa. Sentado en una silla en la calle y acompañado a esta persona en su último día en este mundo, reflexione un poco, sobre este otro aspecto.

La muerte es lo contrario de la vida, esta es luz, risa, alegría, movimiento, charla, amor, pasión, esfuerzo, toda una gran sinergia en torno de un individuo, que despliega una gran actividad en tanto cuenta con vida, actividad que se lleva a cabo en un espacio físico en el que interactúa con su cuerpo material; la muerte es lo contrario, es el lado oscuro, la noche, tristeza, melancolía, fin del cuerpo físico, su presencia es etérea, la muerte generalmente representa el fin de un ciclo de actividades.
 
Pero como sabemos que efectivamente la muerte es todo lo anterior, nuestras creencias influidas por la experiencia, por historias y leyendas nos llevan a tener esta opinión; sin embargo, que datos objetivos tenemos para demostrar que la muerte es la parte oscura de la vida.

Que nos inspira para pensar de la forma descrita.  Es cierto que La muerte es la otra cara de la  moneda, que se ciñe sobre todo aquello que tenga vida, no sólo en los seres humanos, también en los animales, las plantas, las células y otras especies vivas que debido a esta condición fenecen, y sí, efectivamente con ella se cumple un circulo, nacimiento, vida y muerte.

Luego entonces la muerte esta condicionada por la vida, aquella es consustancial a esta, lo irónico es que la muerte debe su existencia a la vida. De lo que podemos resaltar como una primera conclusión: la muerte, reina sobre la vida en tanto esta es vida, no existe muerte donde no hay vida.

 Me cuestiono si podríamos deducir lo siguiente: donde hay muerte no existe vida.

Si  mantenemos el principio que la muerte es la culminación del trayecto del ser humano en su cuerpo físico en una línea del tiempo, la conclusión es que no puede existir vida después de la muerte.

Sin embargo, creo que podríamos cuestionarnos  ¿Y la muerte no es el inicio de un nuevo ciclo?  En el universo, todo fluye, circula, nada se desperdicia, estamos de acuerdo que la muerte cierra un circulo, pero con esta ¿Que nuevo circulo se abre? Esa es otra línea del tiempo que se contabiliza a partir de un deceso, sólo que este nuevo ciclo no hemos sido capaces de evidenciarlo, de registrarlo y tampoco sabemos a ciencia cierta como este nuevo circulo se desarrolla, no sabemos que apariencia adopta la persona muerta, es obvio que esta no conserva los rasgos físicos que formaron su persona y sus actitudes que conformaban su personalidad, no tenemos idea del camino que recorre, hacia donde lo recorre, no sabemos, ni entendemos que la muerte puede ser un mundo paralelo a la vida, así como el día perece con el ocaso y da paso a su lado oscuro(la noche) en el día existe toda una serie de actividades, por el hecho de que el día fallece y surge su lado oscuro no significa que no exista actividad, la cual por cierto si podemos evidenciar, pero en el caso de la muerte, aun no hemos podido asomarnos a esa ventana, no sabemos exactamente que es lo ocurre, que es lo que sucede.

Hay quienes opinan que no existe nada después de la vida, y que esta termina con la muerte, pero entonces diríamos que la muerte significa la nada y de esta nada surge, lo cual desde nuestro punto de vista no completamente cierto, diríamos entonces que de la nada surge la antimateria, lo cierto es que de la nada surgió la vida, y si al comienzo existía la nada, en que consistía esta, quien y como se creo la nada, finalmente el ser humano se ha dedicado exclusivamente a estudiar a la vida en sus múltiples formas y poco o nada se ha detenido a estudiar a su lado escuro, ¡la   muerte!.
 

sábado, 17 de septiembre de 2011

Pasos


Los oigo venir por la calle, presurosos, firmes, vacilantes, calmados, tranquilos, cansados, joviales, imperceptibles, ruidosos, se alejan cuesta arriba, cuesta abajo, en el calor, en el frio o en la lluvia, siguen su camino, casi nunca se detienen, sólo para descansar ¡a donde irán!, quien lo sabe siguen muchas direcciones, se bifurcan por todos lados.


Los pasos siguen diferentes caminos, diversas sendas; por lo tanto, encuentran distintos finales, unos quizás muy cercanos otros tal vez lejanos. Algunos quizás encuentren caminos sencillos, de fácil transito, otros seguramente encontraron obstáculos difíciles, caminos al parecer intransitables llenos de maleza y de obstáculos, seguramente no todos los pasos encontraran sendas sencillas, ¿me pregunto si todos concluirán su camino? No lo se, tal vez alguno se queden en su trayecto, estos miraran truncados su camino, no conocerán el final de la senda.

Los más llegaran a buen puerto, felices de haber terminado su trayecto, llenos de alegría se sentaran a lado del camino bajo la sombra de algún árbol para mirar el camino recorrido y mirar lo cerca de  su destino.

Y que si los pasos andados no eran por el camino correcto, se tendrá que desandar lo andado, que cansancio el volver a dar el primer paso para otra nueva ruta, otra nueva senda.

Todos los pasos que damos en nuestra vida tienen un fin, todos nos llevan algún lado, satisfacen una necesidad; sin embargo, no somos consientes de ese primer paso que en algunas ocasiones resulta muy difícil darlo, y que seguramente en la mayoría de las veces nos cambia la vida, la perspectiva de las cosas.

Ese primer paso es el génesis de todo un camino que habremos de recorrer en la vida, nos lleva a muchas facetas de nuestra existencia la cual culminamos sea cual sea el resultado y no somos consientes de ello.

Ese primer paso vacilante que nos levanta cuando niños y nos permite descubrir toda una nueva experiencia de vida que ya no nos dejará, también nos conduce de manera inexorable de manera vacilante al dar el último paso de nuestra vida.

Ojala fuéramos consientes y nos sentáramos a mirar el primer paso de nuestra vida a donde nos ha conducido, lo cual muchas veces resulta tan difícil como: la elección de la pareja, la separación de la pareja, la carrera a estudiar, el trabajo de nuestra preferencia, el ofrecer disculpa a otro ser humano, el dejar de  ingerir alcohol, drogas, a elevar nuestro espíritu y nuestro intelecto, entre otras.

Ese primer paso, que nos levanta del suelo, nos da la vida, nos lleva por caminos insospechados, nos fortalece y nos conduce a conquistar otros ámbitos que antes de él eran impensables, nos empuja a conocer nuevos mundos, nuevas experiencias, nuevas emociones.

Ese primer paso se debe aplicar de manera metafórica a todos los actos de nuestra vida.

Gracias a mis pies que me han levantado del lecho en que estaba postrado y me han traído hasta aquí, mañana no se aun hasta donde me conducirán, pero al día de hoy hemos descubierto un mundo jamás imaginado, se que estarán listos para continuar el camino, aunque se que algunas veces están cansados, pero seguro que seguirán.

domingo, 4 de septiembre de 2011

Sensaciones


He dejado de escribir de la forma frecuente como lo venia haciendo y si lo extraño, luego me voy a la cama y me recrimino el no poder terminar el texto que tengo en el ordenador casi para terminar. Al día siguiente me dispongo  a concluir tal tarea y resulta que lo olvido, los temas cotidianos me absorben de tal suerte que estoy dejando en el tintero contar las cosas de las que soy testigo y aquellas de las cuales escucho con atención las historias.

Dejar de escribir seguramente se puede comparar con el pintor que deja su lienzo inconcluso, sólo un boceto aparece en su cuadro, algunas cuantas pinceladas denotan líneas formas y colores, las cuales reflejan y expresan una idea, una visión muy particular de quien la mira e incluso algo puede ser modificado por él o como ocurre con el escritor.

Allí en ese cuadro, en ese mundo, en ese universo particular, se genera una idea una visión de las cosas, simple, sencilla, casi imperceptible, pero hay un embrión algo nace, algo emerge, algo viene a la luz.

De ese cuadro en algún momento inexistente surge la luz se expresa una idea, un concepto, algo nace a la vida, el pintor o el escritor se convierten  en creador, su obra poco a poco aparece y expresa en colores, con sonido,  en formas y en movimientos todo un mundo nuevo.

Dice Aristóteles que: “nada está en la mente que antes no haya estado en los sentidos”, yo me niego a creer en esa afirmación como una verdad absoluta; en la aseveración de que sólo la experiencia sensitiva nos puede hacer creativos, creo en la experiencia como método de comprobación, pero también creo en la inspiración, en los sueños en la imaginación, en las emociones, en el amor, incluso en la pasión como forma de dejar lo mejor de nosotros en todo lo que hacemos, que las cosas en que nos empeñamos en realizar las hagamos con el corazón, con el deseo profundo de hacerlas bien; también creo en ese mundo de las ideas, que Platón compara con la caverna, y en este sentido me pregunto ¿Porque un ser humano tiene que ser desprovisto de estos dos mundos?

Ambas formas de explicar la existencia del ser humano en nada se excluyen antes se complementan, necesarios incluso para la formación del  individuo, porque creer que sólo existe un mundo racional y que este sólo puede ser explicado de manera racional, es reducir al ser humano a su parte material.

De acuerdo con Aristóteles debemos creer en lo que podemos ver, tocar, sentir  y obviamente dejar a un lado nuestra verdadera esencia como seres humanos que esta muy lejos del mundo material en el que vivimos. El ser humano no se puede reducir a esta visión, la humanidad el individuo es más que ello.

El instrumento allí está, pero la partitura no surge, si no existe inspiración, sino existe emoción, si el espíritu no se siente rozagante, las notas de una rica melodía no surcan el espacio si no se vive la emoción, si no existe el amor, si no se ama a la vida, si falta la pasión por ella.

Porque traigo esto a colación, por la sencilla razón de que me doy cuenta que he dejado de escribir con el corazón, le he dado paso más a la experiencia sensitiva y he dejado de escribir con el alma, con la pasión,  he dejado de escuchar la voz interna y no quiero dejar de ser yo.

Mi conclusión es que en todos los actos de nuestra vida, utilicemos ambos mundos, tanto el mundo sensitivo (el mundo de la experiencia) como el mundo de las ideas, somos productos de estos dos universos también expuestos por Platón y Aristóteles, a ambos les asiste la razón, en el largo camino de la evolución la  humanidad acumulado una serie de experiencias que le han permitido desarrollarse usando ambos mundos ideas y razón (religión y ciencia).

martes, 19 de julio de 2011

Orden Perfecto

                                                                                                     
                                              "Salgo a la calle porque creo en lo
                                                        que no puedo ver".
                                              Expresión de un Invidente.

No es que este peleado con dios, nunca lo he estado, simplemente no lo conocía como lo conozco el día de hoy, me declaro cristiano, admiro a Cristo y sus enseñanzas, le hablo todas las noches, yo no se si me escucha, nunca me ha devuelto mis diálogos, aun así creo firmemente en él, ha sido siempre la fuente de mi inspiración hoy lo se, desde niño crecí con su imagen.

Tengo una vaga idea, de que crecimos juntos en el bosque, que nunca estuve solo, que siempre fue mi compañía en esos campos, de joven nos distanciamos un poco, estoy seguro que él me buscó, lo se, los amigos siempre se buscan,  me buscó, sólo que yo tomé otro camino, buscando lo que había crecido conmigo, que es parte de mi vida, que lo llevo en mi corazón y en mi alma. Hoy nos volvemos a reencontrar, por ello aprovecho cualquier rato de la noche o del día para platicar con él, para darle las gracias por el nuevo día, por mis amigos, por mis logros profesionales, incluso por mis derrotas y por todo lo que me ha dado, hoy como siempre admiro su grandeza, ese orden perfecto de cosas que habitan en este mundo.

En primavera todas las mañanas una primavera me despierta con su canto, es algo extraordinario, bello, hermoso, cuando la escucho se que ese canto no puede ser creado por el hombre y es  curioso, ese canto me ha enseñado que tu y yo nos conocimos, cuando era pequeño y salía corriendo de la casa cruzaba el patio y me internaba en el huerto de café, mi refugio preferido, allí te conocí junto a unas hermosas y grades hortensias de colores, rodeado de paz de tranquilidad, en ese momento te encontré, pues aunque era un duende entre la finca, sabia que tu existías en la belleza del campo en el perfume de la flor en el susurro de viento, en el roció de la mañana, en rojo de los tulipanes, sí siempre lo supe que ese orden perfecto estaba mas allá de la mano del hombre; aunque todas esa flores, tulipanes, hortensias, rosas, camelia, duraznos los sembró mi abuela, sabia que ella sólo era tu instrumento, pues el proceso de la vida estaba más allá de la mano de la abuela a quien también amo mucho.

Ahora lo se, esa ha sido mi constante búsqueda.

Te conozco y me conoces…estoy seguro que un día caminaremos juntos o tal vez antes ya lo hemos hecho…volveremos a disfrutar del color de las rosas, de las plantas del canto de las aves, de la soledad y de la quietud, del silencio y de la inmensidad de la bóveda terrestre, aun  no se cuantas aventuras más pueda vivir a tu lado, mientras permíteme seguir en este mundo y permíteme ser portavoz de tu existencia, ser ejemplo de tu grandeza, hasta en tanto tu no decidas otra cosa…siempre lo he sabido, pero lo reconozco hoy soy plenamente consiente de tu grandeza y de tu bondad.   

Agradezco a Abraham Lara Lara las fotos que se publican en esta nota pues, con excepción de la ultima,todas son de su autoria.

jueves, 16 de junio de 2011

Evolución y Cultura


 Tal parece que el ser humano en su inconsciente, alberga un sentimiento de autodestrucción, con solo ver lo que hace con la naturaleza podemos percatarnos de ello. Todo mundo habla del calentamiento global, de las miles de hectáreas de bosque talado, de los ríos contaminados, de las toneladas de gases emitidos al ambiente;  todos somos consientes de las consecuencias que ello trae consigo: lluvias fuera de su ciclo natural, elevadas temperaturas, tsunamis, terremotos; sin embargo, día con día contribuimos al deterioro del medio ambiente.

¿Que nos hace falta para crear conciencia? Esperar que la naturaleza al sentirse amenazada, se sacuda de nosotros al considerarnos una especie invasora. Si continuamos destruyendo nuestro entorno, no habrá cultura que pueda ufanarse de ello, (digo si es que algo se llegase a salvar), sólo quedaran ruinas de lo que costo años de evolución, lo cual demostrará nuestra mezquindad.

La selva y el bosque son productores de agua, en ambos se dan intercambios de materia y energía, regularizan el equilibrio hídrico y el clima y sirven como prevención contra la erosión del suelo, protegen la biodiversidad, proporcionan madera, leña, retienen el carbono y frenan el cambio climático, generan empleo y son un lugar de esparcimiento y ocio para la población de las grandes urbes,  entre otras tantas cosas, incluso se utilizan en favor de nuestra economía; no obstante esa evolución de los bosques y selvas que tardo años y siglos en cubrir nuestro planeta, con la aparición del ser humano, han sufrido en un  periodo muy corto una tremenda agresión, rompiendo el perfecto equilibrio que existe en la naturaleza, al rasgarse ese hilo tan fino, tan sutil entre la naturaleza y el ser humano, vemos hoy en día las consecuencias de esa agresión a nuestro  entorno.


En términos generales le damos el nombre de cultura a todo aquello que ser humano hace, todo lo que ha incorporado a su entorno; no obstante me resulta, difícil comprender que la agresión que hacemos a la naturaleza le podamos llamar cultura, tal vez le podamos denominare como una cultura de la destrucción, también me resulta increíble que no entendamos que esas agresiones a la naturaleza hoy en día se está revirtiendo y ponen en peligro nuestra existencia como seres vivos.

Me queda claro que otras especies vivas se adaptaran a las nuevas condiciones que imperen en la tierra, porque aquellos vaticinios de que el mundo se va acabar no me resultan del todo ciertas se acabara nuestro mundo la forma en que vemos y percibimos las cosas; sin embargo la humanidad pasará y el sol prevalecerá, ya que muy seguramente cuando la tierra se sienta amenazada de esta especie viva llamada ser humano, se sacudirá de nosotros, no me queda la menor duda que la tierra tiene la capacidad de auto regularse, de sanar sus heridas y sobre todo de generar vida.

La arrogancia del ser humano no nos permite ver que no somos el centro de la naturaleza mucho menos del universo,  en este orden perfecto sólo somos parte de ese gran andamiaje, pero no somos indispensables para que el mundo, el universo la tierra continúe su viaje a través del tiempo y del espacio. Si no cambiamos nuestra actitud hacia el otro ser vivo llamado naturaleza y si no somos capaces de comprender que esta tiene sus leyes muy seguramente habremos de pagar muy caro las agresiones.

Agradezco a mi amigo José Antonio Galván Martínez por las fotos que se publican en esta entrada, toda vez que son de su autoría.









sábado, 28 de mayo de 2011

El silencio


“He buscado en todas partes el sosiego, y no lo he encontrado sino sentado en rincón apartado con un libro en las manos”. Fray Tomas de Kempis.


En este mundo tan caótico, tan ruidoso, el silencio pareciera ser que no tiene espacio, aunque con este ritmo de vida el silencio le viene bien al alma y al espíritu, un momento de silencio es acallar nuestro mundo externo para darle paso al mundo interior, para darle voz a nuestro yo interno.

Hoy en día el ser humano vive de manera agitada, lleva una vida muy convulsa. Pesadas horas en la escuela, el trabajo, las jornadas laborales se extienden a más de ocho horas, es muy común escuchar: “se a que hora entro pero no a que hora salgo”, a esto ay que agregarle el tiempo que se pierde en las redes sociales (no satanizo este medio de comunicación).

 Todo este ritmo de vida lleva al ser humano a perder su equilibrio emocional, derivando de ello encontramos al estrés y la ansiedad,  lo cual obviamente desencadena en otra serie de enfermedades.

Este desequilibrio emocional en mi opinión se debe entre otras cosas a ese ritmo de vida tan agitado que llevamos, llegamos incluso a sentirnos culpables por llegar a casa y no haber terminado el trabajo; muchas dependencias trabajan con cargas de trabajo y resulta que cuando estamos recostados en casa con la cabeza en la almohada comenzamos a pensar en que no terminamos tal o cual cosa o que debimos haberla hecho de manera diferente.

Los cursos de inducción que se dan en las respectivas aéreas de trabajo, llevan consigo una buena carga motivacional para cumplir con nuestras metas; sin embargo, estas se cumplen y siempre hacen falta más de tal suerte que poco a poco, comenzamos a esclavizarnos en el trabajo a quedarnos más tiempo pensando avanzar en abatir la carga laboral, incluso en ocasiones entramos antes de que inicie formalmente nuestra jornada.

De esa manera lenta pero constante, comenzamos a permanecer más tiempo en nuestra área laboral, ahora no basta los días de trabajo, sin que nadie nos lo pida nos comenzamos a quedar primero un sábado, luego otro, así sucesivamente hasta que esta actitud se extiende a los días domingos.

Mientras la vida agitada se reproduce por doquier, el ser humano se pierde en este mundo de caos, no permitimos escuchar al silencio, esa calma que experimenta el alma y el espíritu; esa quietud ese sosiego de que habla Fray Tomas de Kempis, cuando menciona que en  lugar apartado en total calma, podemos disfrutar de un buen libro, tomar una buena taza de café, té, mirar por la ventana el vuelo fácil de un ave, el agua que cae y se desliza por la venta y de manera furtiva huye por el suelo alejándose de manara vertiginosa, la caricia suave de la persona amada, o simplemente la esa sensación de vacio de paz interna de descanso espiritual, el alejarse del mundo con su ruido tan atroz.


El silencio es lo contrario del ruido es la ausencia de este, un espacio, un lapso pequeño o grande, voluntario o involuntario en el que el ruido deja de escucharse, pero no existe la quietud o silencio total, la ausencia de sonido total, el efecto que produce la ausencia de sonido externo nos permite escuchar una serie de sonidos que hemos dejado de percibir y de recapacitar en ellos, la quietud y el silencio nos permiten escuchar aquella parte de nuestro ser que poco conocemos y experimentamos el buscar y encontrar nuestro yo, en la paz y la quietud del podemos escuchar a nuestro yo interno esa vocecita a la que llamamos conciencia o dios y que en el silencio en la tranquilidad del alma y del espíritu nos permite reencontrarnos, este goce del silencio también se le llama reflexión etc., lo que nos permite encontrar respuestas a nuestra existencia.
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    agradezco a mi amigo José Antonio Galván Martínez, por las dos últimas fotos que se publican en este espacio ya que son de su autoría.

viernes, 13 de mayo de 2011

¿Qué es la vida?


Hace uno cuantos días que había dejado de escribir, como si de repente ese deseo por trasmitir ideas, vivencias a otras personas hubiese sufrido un estancamiento que pasó no lo se pero estoy de nueva cuenta aquí, comentado con quienes se toman el tiempo de pasar por este espacio, agradezco a todos aquellos que se asomaron a esta ventana de la vida y de la imaginación su interés; no pretendo ser filosofo ni poeta, sólo narrar las cosas cotidianas que suceden a nuestro alrededor y que en ocasiones no somos consientes de ellas pero suceden, ser narrador de esas pequeñas cosas que forman la vida, tu vida y la mía.


María de los Ángeles es una persona muy agradable de trato fácil, con mucha energía, de palabra fácil con una forma de ver la vida muy positiva; sobre todo, es una mujer que tiene muchas preguntas a las que aun no les ha podido dar respuesta, trabajadora de tiempo completo y estudiante de fin de semana.

Entre sus preguntas se encuentran, ¿Quién es dios? ¿Qué piensa dios de ella? Lo que ella piensa de él.

Su mayor ilusión adquirir conocimiento, luego  escribir un libro, como carece de una computadora, sus escritos los lleva de manera manual en un cuaderno. Comprende que su ciclo en su trabajo actual esta por concluir, que si busca el conocimiento tiene que buscar nuevos horizontes; sin embargo, no puede irse así sin tener algún otro empleo.
  
Coincidimos en una oficina pública, procedió el saludo, luego una caminata con una charla más o menos introductoria, sobre todas las cosas que tiene por hacer y que aun no ha podido emprender, al estar esperando el servicio público, me hizo una pregunta que al día de hoy aun le doy vueltas e incluso la he comentado con otros amigos.

-Le puedo hacer una pregunta

-Si dime

-¿Que es la vida?

A simple vista el cuestionamiento no parece nada complicado; no obstante, las dificultades vienen cuando nos detenemos a meditar por un momento para responder que es la vida.

-Considero que la vida es una serie de acciones en una línea de tiempo y espacio.

Seguramente, debió sorprenderse ante tal respuesta, yo mismo hoy que la medito me sorprende haber contestado de esa manera ¿Realmente eso es la vida? Es una respuesta, muy corta que se circunscribe a un momento de  tiempo y aun espacio físico.

En este línea de tiempo y espacio, el ser humano realiza una infinidad de acciones y en determinadas ocasiones debe tomar decisiones que son impostergables porque el tiempo apremia,  otras acciones que se dan en esta línea de tiempo, aunque afectan al ser humano, este nada puede hacer por evitarlas son ajenas a su voluntad, tal es el caso de los fenómenos naturales la lluvia, la salida del sol entre otros.

Quizás debería comenzar por definir  palabras como tiempo y espacio. El tiempo se utiliza para medir las horas del día, y la unidad de medida mínima es el segundo, de esta manera, hablamos de días, meses, años décadas, milenios, de tiempos idos y tiempos futuros, en ocasiones se oye decir:

 ¡Todo tiempo pasado fue mejor¡. ¡Que tiempo aquellos señor Don Simón!. ¡No hay nada nuevo bajo el sol!.

Seguramente habrá diversas definiciones de la palabra tiempo, en este caso se aplica a la duración de la vida humana que es el termino, durante el cual el individuo desarrolla toda una serie de actividades que en su conjunto llamamos vida.

Espacio: lugar, sitio, distancia, para efectos de nuestra definición podríamos señalar que es la parte (entorno) que ocupa nuestro cuerpo físico y por ende las actividades o acciones que en este se realizan.

Así que la vida de un ser humano puede durar unos meses, años, décadas y durante este tiempo cada uno de nosotros realiza una serie de acciones, ser niño, joven adulto, viejo, hijo, esposo, padre, amigo, maestro, entre otras; no obstante, en esta línea del tiempo no todo ser humano cumple con el ciclo de vida señalado. Algunos mueren niños o jóvenes; por lo tanto sus acciones en ese tiempo tan corto son mínimas en relación a quien concluye su vida en la etapa de de la vejez.

Es obvio que la vida no es una receta, un molde, cada persona lleva a cabo acciones distintas durante esta; en tal caso,  la vida se compone de infinidad de acciones que tal vez en algunos casos son similares, pero que son llevadas a cabo por distintas personas, en tal razón la óptica con que se hacen es distinta.

En este contexto, toda esta energía traducida en acciones, toma de decisiones, eventos naturales crea una sinergia, a la que llamamos vida.

Resulta sumamente complicado definir la vida, reducirla a su máxima expresión cuando esta rebasa todo limite, la vida ¡ay que vivirla!, de manera plena, sentir henchirse el pecho con los pulmones llenos de oxigeno aspirado por la mañana, en la montaña o en la playa, sentir la ternura del niño, el olor de la rosa, el olor a tierra mojada después de la lluvia, el canto del ave o del grillo, estrechar la mano franca y sincera de un amigo, sentir la pasión desbordante por la mujer amada, sentirse útil al ayudar a cruzar la calle a un invidente o alguien de la tercera edad, disfrutar de la brisa  en nuestra cara sabiendo que antecede a la lluvia, tantos y tanto pequeños detalles que forman la vida.

Cada vez que me cruzo con María de los Ángeles, me recuerda esta definición de la vida y me llena de energía sus ganas de vivir, de aprender, de conocer.


Sus ganas de vivir son inmensas tanto que contagia, irradia ese deseo de perdurar, de hacer.
¡Viva la vida! y quienes se atreven a vivirla.

jueves, 17 de febrero de 2011

El descubrimiento de la existencia



He notado que mis notas tienden a versar sobre el ser o la existencia, tal vez de manera inconsciente estoy buscando una respuesta a mi propia existencia, a la trascendencia del ser, ese descubrir que la materia es más que eso,  y bien ya que esto me lleva hacia allá, vuelvo a la existencia de hecho este es un tema que he dejado pendiente y poco a poco he dejado que solo vaya adquiriendo forma, y bueno no se si es el momento de escribir sobre este tema, pero algo me dice que si.

Existen escuelas iniciáticas que se conflictúan con la academia o mejor dicho estas ultimas con las primeras en relación a la forma de enseñanza, utilizando las primeras un método espiritual, al contrario de lo que enseña la academia, donde todo se conoce a través del razonamiento, como parte de la ciencia la cual es consustancial a la comprobación.

Sócrates señalaba, que la verdad sólo se puede captar a través del razonamiento donde no intervengan los sentidos: la vista, el oído y el tacto que me pueden engañar, más no así el alma que busca la verdad, el alma que para llegar al conocimiento verdadero tiene que hacer uso del pensamiento[1]. Parece algo paradójico y como si fuera un  juego de palabras ¿Cómo se puede usar la razón? sin que intervengan el pensamiento, los sentidos y ¿Cómo el alma puede llegar a la verdad usando el pensamiento?, el cual no se puede concebir sin el uso de los sentidos.

 Años más tarde Descartes lo pone de esta manera, cogito ergo sum “pienso luego existo”[2]  Para llegar a la anterior enunciación Descartes, antes de demostrar el mundo material, se apoya primero en la demostración de la existencia de dios, haciendo una separación del mundo racional con el mundo espiritual “Bajo el nombre de dios entiendo una sustancia, infinita, eterna, inmutable, independiente omnisciente y omnipotente.  Más  ¿Cómo puedo yo, que soy un ser finito, haber producido, la idea de un ser infinito, si lo más no puede derivarse de lo menos? Es necesario concluir, por lo tanto que dios existe, pues solo una Sustancia verdaderamente infinita puede ser la causa de la idea de un Ser infinito que encuentro en mi” [3]      

El conocimiento, la ciencia se adquieren a través del pensamiento, paso previo del razonamiento que hacen clara mi percepción del mundo exterior, porque se puede pensar pero no ser consiente de nuestra existencia. Las escuelas iniciáticas buscan en el candidato una introspección a su interior,  confrontando este con el mundo exterior, ese ejercicio del pensar, resulta distinto del mundo material, de esa confrontación las sinergias que de allí resultan son distintas tanto de las del exterior como de las del interior.

La postura de Descartes es contraria a las escuelas iniciáticas y se acerca más al método científico basado en el razonamiento; sin embargo, de esta obra nace el sistema de la duda metódica, el dudar de todo como condición sine quan non para encontrar la verdad en oposición a la escolástica de Santo Tomas basada en la fe o en la autoridad de Aristóteles a través del método deductivo de premisa mayor, menor y conclusión.  Existe coincidencia que con esta obra nace la filosofía moderna alejada de la filosofía de Aristóteles y de la Edad Media

En esa búsqueda Descartes señala que todo me puede engañar incluso los sentidos,  y de esta observación ay quienes mencionan que su método lo obtuvo al confrontar al silogismo Aristotélico con las matemáticas, no quiero referirme a todas las implicaciones de obra de Descartes, sólo a su famosa frase   “pienso luego existo

Alguna vez que mencione el cogito ergo sum (debate que aun esta pendiente), se me dijo que habría que ponerlo de manera inversa; se decir, primero soy y luego pienso.  Descartes utilizó el término pensamiento como sinónimo de meditar de razonar, porque seguramente no se refería a los miles de pensamientos que cruzan por nuestra mente, de los cuales una gran cantidad no tienen nada que ver con la contemplación de nuestra existencia. (Una de las primeras enseñanzas de las escuelas iniciáticas,  es mostrarle al iniciado como dominar los vicios, entre estos el dejar que la mente divague por donde ella quiera, lo cual  consume una gran cantidad de energía sin que lo producido sea en benéfico. De tal suerte que ordenar los pensamientos y aquietar la mente,  ayuda a enfocar lo que se  busca)

Me parece que Descartes seguramente entendía que para pensar primero se debe existir, también estoy cierto que no se refería a la parte física de la existencia, esa es la parte común y primaria de todo ser; sin embargo, creo que se refiere a la parte superior del individuo aquel  que trata de responder a las preguntas básicas, ¿De donde vengo? ¿Quien soy? ¿A donde voy?, buscando entender la naturaleza de las cosas.

Risieri Frondizi analizando a Descartes señala  “No puedo eliminar el pensar sin contradecirme. Y al estar seguro de que pienso, estoy también seguro de que existo en cuanto ser pensante. No que existo como un ser físico, biológico, con cabeza, brazos y piernas, sino que existo al menos como ser que piensa”[4]      

Considero, poco probable que Descartes no entendiera la existencia física como primer elemento del pensamiento; sin embargo, no todo ser humano es consiente de su existencia, no todo ser humano es capaz de pensar y luego comenzar a existir, muy seguramente el ser humano confunde la existencia física y el pensamiento básico resultado de la percepción de los sentidos con la plena conciencia de (su) la existencia.

Platón[6] señalaba lo siguiente, para quienes viven sumidos en la ignorancia, es como sumergirse en las sombras de una caverna, absortos en su vida cotidiana, esclavos de la penumbra, viviendo de sus instintos; sin embargo, y de manera paradójica esta misma caverna llena de oscuridad de humedad, esta muerte para muchos inadvertida, es el detonante, para descubrir la existencia, utilizando el método de la dualidad de las cosas, del caos nace el orden, de la vida la muerte.

Platón a esta discusión de la existencia lo denomina el mundo de las ideas, y en esta disciplina del pensar para existir, me cuestiono ¿Que este mundo de las ideas? ¿Donde se generan? ¿Como es que adquieren cuerpo, sustancia? ¿Cómo se desarrollan? ¿Como adquieren vida propia a la de su creador? ¿Cuál es su naturaleza? ¿Como de repente esa chispa divina hace que se conectan idea, causa y efecto, entre hombre y principio?; incluso se pudiera pensar que el mundo de las ideas corre paralelo al mundo físico. No alcanza el espacio para tantas inquietudes ¿Pero no acaso esa es otra de las finalidades del descubrimiento de nuestra existencia descubrirnos en tanto seres pensantes, cuestionarse de lo que aun no comprende, investigar y formarse un criterio de lo que busca?

Seguramente estos cuestionamientos infinidad de personas se las han planteado, y habrán encontrado respuestas; ¿No sería más fácil acudir a sus repuestas?, ¡si, así¡ lo hiciera, no serían mis ideas ni mis pensamientos, no serían mis conocimientos, ni mis conclusiones, no estaría buscando darle sentido a mi existencia, estoy cierto que sería, mucho más sencillo, copiar y pegar un tratado sobre el mundo de las ideas, sobre el pienso y luego existo, sobre la caverna de Platón; sin embargo, y sin temor a equivocarme estaría renunciando a mi derecho de pensar y de dudar, estaría renunciando a mi crecimiento, a mi búsqueda espiritual; puede equivocarme, ¡lo se¡, pero si aplico el método de la dualidad de las cosas, puedo concluir que en el error esta el acierto, Sócrates[7] lo pone de la siguiente manera “La verdadera opinión ocupa un lugar entre la ciencia y la ignorancia.”

Hoy más que nunca cogito ergo sum, tiene aplicación, antes era el oscurantismo, hoy es una sociedad inmersa en el consumismo, en el mundo profano pocas personas se dedican tiempo para meditar, si acaso cuando las cosas van mal una plegaria al creador cualquiera que sea la creencia, plegaria que es para pedir, casi nunca para dar las gracias, poco se disfruta de la naturaleza, del cielo y las estrellas, de la amistad, el mundo agitado en que vive, no le permite descubrir el valor de la vida, mucho menos le permite darse cuenta de su existencia y de su compromiso para con él, la sociedad y el gran arquitecto del universo.

La sociedad pocas veces como hoy viven un auge en la comunicación y en el conocimiento, somos la era de la comunicación (de la iluminación), pero donde quedó la vida espiritual, para quienes provienen de las escuelas iniciáticas, en esa dualidad de las cosas, prevén de manera cercana un mundo más espiritual, más cercano, más humano del que se vive hoy.


[1] PLATON. Diálogos, Edit. Leyenda, S. A. de C.V., 2008, p.179.180
[2] DESCARTES, René, Discurso del Método, Edit. Alianza editorial, S.A., Madrid 1979, p. 22-27
[3]Idem, Pag. 28
[4] Idem. Pag. 24
[5] THOMAS, Pain, La edad de la Razón. Edit. Conaculta, México 2003, p.44-47
[6] LARROYO, Francisco. Platón Diálogos, Edit. Porrúa, S.A. México, 1978.
[7]Op. Cit.p 149.